Mis ojos del universo

Hay momentos en que parece que todas las calles conducen inevitablemente a un mismo callejón sin salida, pero una vez  dentro, sabes que solo forma parte de un enorme laberinto no siendo mas que una trampa mas del juego de la vida...No hay nuevos caminos, siempre han estado ahí, solo que no los tomanos...

Walter Red por primera vez en su vida, aquella noche vació su mente de prejuicios y temores y con ojos chispeante, como de niño que estrena, se observó en el espejo al que tanto había rehuido en los últimos años, y fingiendo mirada burlona contempló al otro lado a alguien, que a primera vista solo reconoció de pasada.. tal era el cúmulo de imágenes que se había construido que habían acabado sepultando su verdadera alma.....Voleteó de puntillas sobre sus andanzas y reconstruyó una larga secuencia de acuciante huida hacia ninguna parte...Entonces, como impulsado por una extraña energía echó a correr escaleras arriba en medio de la madrugada atravesando la puerta de la vieja azotea hasta situarse en medio de ella, convirtiéndose en isla rodeada por todas partes, del viento rezumbón del verano sureño que tantos recuerdos arrastra en los surcos de su fino silbido, acariciándole los oídos del corazón con regustosa melodía, música que nunca podría ser música si no fuera interpretada por el instrumento de su mente...Siguiendo el rastro de ese arrebatador sonido elevó la cabeza hasta la vía láctea y una fuerza hasta entonces desconocida le transportó a través de sus ojos, hasta la gran y luminosa espiral celestial que recordaba de su infancia como el invencible amuleto que utilizaba cuando con sus ojos llenos de lágrimas se despertaba en medio de la noche tratando de salir del laberinto que sus pesadillas fabricaban para el.....Cerró los ojos
y durante un instante de eternidad no hubo pasado ni presente, no hubo dolor ni alegria.....Conoció lo desconocido.

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